frente a esto, el Estado responsabiliza a los establecimientos de la mala calidad que imparten a sus alumnos, y a su vez el colegio culpa a los alumnos por no responder de manera correcta frente a cosas que supuestamente ya deberían saber, lo cual se vuelve una cadena que termina sin responsables de la mala educación escolar en nuestro país y todo por unos resultados que realmente lo reflejan aquello que los alumnos aprenden.
Las autoras ponen énfasis en lo difícil que es medir el rendimiento de cada institución por medio de una prueba de selección múltiple y además porque muchos establecimientos se centran en preparar una "buena" prueba SIMCE dejando de lado cómo los niños están aprendiendo y cómo los profesoras están utilizando las técnicas de enseñanza.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario